Del "paga lo que quieras" al "a este invito yo": artistas que experimentaron con el precio de sus discos

Si sois jóvenes quizá no recordéis que antes los discos, valían dinero. Pagabas por uno más de lo que cuesta una suscripción mensual de Apple Music o Spotify.
Los discos costaban lo que costaban dependiendo del formato: vinilo, cassete, CD o, como mucho, si eran dobles. Con la entrada de la era digital, algunos grupos se atrevieron a experimentar con el precio de sus álbumes hasta el punto de, incluso, regalarlos.
In Raibows de Radiohead costaba... lo que tu quisieras
Hay estrategias de precios para todos los gustos. Dejar que los clientes escojan el precio que quieren pagar (incluso si es cero) no es una de las más habituales y sí una de las más arriesgadas. Especialmente si hablamos de un disco de una de las bandas más exitosas del planeta.
En 2007, sin las plataformas de streaming tan afianzadas como ahora, y la industria de la música luchaba por mantener a flote la venta de CD's y llevaba a cabo una cruenta guerra contra servicios como PirateBay.
En este contexto, el grupo de Tom Yorke y Johnny Greenwood lanzó "In Rainbows" en digital dando la posibilidad a los usuarios de descargarlo pagando el precio que considerasen oportuno, incluso gratis.
Un movimiento tan audaz cómo arriesgado
A pesar de que más de el 60% de los usuarios lo descargó de manera gratuita, los que pagaron lo hicieron a una media de 6$, dejando unas ventas totales de más de tres millones de dólares.
El precio medio, por lo tanto, fue 2.26$ por usuario. Más de lo que le hubiera reportado el margen de la discográfica (2.25$) e iTunes (1.40$).
El hecho de haber eliminado a los intermediarios ha llevado a la banda a asegurar que el álbum les ha reportado más beneficios que todos los anteriores juntos.O sabían -o alguien les dijo- que el "paga lo que quieras" no es una buena estrategia a largo término. El disco estuvo a la venta de esta manera por tiempo limitado, y no han vuelto a repetirlo en discos posteriores.
Esta ronda la paga Trent Reznor
Al igual que la banda de Yorke y Greenwood, Nine Inch Nails se ha caracterizado siempre por el riesgo y la experimentación, no sólo musicalmente hablando.
Mientras Metallica y el resto de la industria musical aún se lamían las heridas del juicio contra Napster, lanzaron un disco instrumental llamado Ghost I-IV que podías descargar gratuitamente, con licencia creative commos, únicamente a cambio de tu email (ahora nuestros lead magnets parecen bastante cutres en comparación, ¿verdad?). También venía acompañado de este libreto fotográfico.
Pero la cosa no quedó ahí y para el siguiente disco, The Slip (este sí un album típico de Nine Inch Nails, ya que el anterior era sólo instrumental), ni siquiera había que poner el correo. Podía descargarse gratis en su página web con un mensaje escueto de agradecimiento a los fans: "This one is on me (A este invito yo)".
U2 demostrando (para mal) que hasta para regalar un disco hay que tener estrategia
En 2014, en otro gesto altruista del cantante Bono (jé), decidieron regalar su disco Songs of Innocence a todos los usuarios de iTunes. ¿El problema? Que no tenías que descargarlo, el disco aparecía en tu biblioteca por defecto y – peor aún – no podías borrarlo.
Como es lógico, mucha gente no apreció el gesto y tanto la banda como Apple recibieron un merecido backlash.
Muchos usuarios, más que un regalo lo consideraron una intromisión en su privacidad.
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In Rainbows - Radiohead
Ghost I-IV - Nine Inch Nails